Mal olor en gatos: ¿cuáles son las causas probables?

Los felinos son famosos por su pulcritud y sus largas rutinas de aseo. Sin embargo, por impecable que sea su higiene en comparación con otros animales, pueden despedir olores desagradables y generar malestar en su entorno. Comprar Spray elimina olores de gato y otros productos similares es una solución puntual, pero el problema persistirá si no se descubre su origen y se combate desde la raíz.

El mal olor en gatos coincide, en los machos, con la madurez sexual del ejemplar a partir del sexto mes. Sus glándulas liberan feromonas que atraen a las hembras y le ayudan a delimitar su territorio, proporcionando información sobre su edad y estado reproductivo. En particular, las glándulas anales son responsables de la mayor parte de estos aromas. La única forma de evitar este marcaje natural es castrando al animal.

Por otra parte, la otitis y otras infecciones de oído pueden ser la causa. La acumulación de suciedad, cera y cuerpos extraños ofrece un terreno propicio a las colonias de ácaros y bacterias. Cuando estas proliferan en gran medida, ocasionan infecciones que pueden generar pestilencia.

Otra fuente de malos olores es la halitosis canina. La gingivitis, el sarro, los dientes rotos o enfermedades como la estomatitis incentivan la formación de bacterias que el felino, con su respiración, amplifica y esparce a su alrededor.

Los trastornos digestivos en gatos pueden estar detrás de este problema. La diarrea, por ejemplo, produce no solo heces menos sólidas, sino también flatulencias difíciles de soportar para su dueño y otros convivientes. Para remediar esta situación, es recomendable agregar a sus comidas un suplemento nutricional o medicamento antidiarreico, además de revisar su dieta semanal.

En entornos rurales, los gatos domésticos disfrutan de libertad para entrar y salir del domicilio. Esto les hace vulnerables a las pulgas y otros parásitos que pueden acumularse en su pelaje y dificultar su aseo, dando lugar a malos olores.


Categories:

Tags: